El libro de bolsillo se caracteriza por ser ligero, de formato pequeño y manejable; generalmente es una edición barata de una obra ya publicada.
Ya desde la época de la Antigua Roma existía la idea de libros ligeros y transportables, llamados Pugliares, que eran escritos a mano.
Tras la invención de la imprenta en el Siglo XIV, la lectura fue una actividad en constante crecimiento que llegó a masificarse en todas partes del mundo.
En el Siglo XIX, en Inglaterra empezaron a surgir los Penny dreadfuls (término peyorativo que hace referencia al costo del libro, un penique, y la palabra awful, que en ingles significa horrible), eran más económicos y de menor calidad que trataban temas de terror, sobrenaturales o detectivescos, que se popularizaron entre los jóvenes de clase trabajadora. Pero si bien la lectura se había extendido en toda la sociedad a causa de la revolución industrial y la creciente demanda de entretenimiento, seguía habiendo una brecha social entre la gente que podía pagar por libros más caros que trataban relatos clásicos considerados en ese momento más “serios” e “importantes”, y los que no podían pagarlos y debían conformarse con los Penny dreadfuls.
La revolución del libro de bolsillo se dio en 1935, cuando Allen Lane, director de la editorial británica Bodley Head, estaba en la estación de Exeter esperando su tren de regreso a Londres, y buscando en las tiendas no encontró nada para leer que no fueran revistas de moda o novelas baratas. Fue ahí que se le ocurrió crear una colección de libros clásicos, a la que llamó Penguin Books, que se podían conseguir en quioscos como los de las estaciones de tren al precio de una caja de cigarrillos. Esta decisión no solo lo salvó de la crisis económica que estaba sufriendo a causa de la Depresión, sino que logró de esta forma llevar grandes clásicos a las manos de la gente sin importar su situación económica.
La popularidad de estos libros fue tal que incluso los soldados que iban a la guerra los llevaban consigo. Hay una anécdota que cuenta de un soldado que, durante la Segunda Guerra Mundial, fue herido por una bala en el campo de batalla y mientras esperaba a que sus compañeros fueran a socorrerlo, sacó un libro del uniforme y se puso a leer.
Esta editorial tuvo tanto éxito que añadió un sello llamado Pelican, dedicado exclusivamente a publicar material original, que en general respondía a tendencias progresistas e ideologías de izquierda.
Fue tal el éxito de estos libros, que llegaron a influir en el campo político, haciendo que el Partido Laborista llegara al poder en 1945. Uno de los líderes de este aseguró que el hecho de que el pueblo hubiera podido acceder a textos progresistas durante la guerra había sido clave para obtener la victoria.
En lo personal me resulta fascinante cómo fueron evolucionando los libros de bolsillo hasta convertirse en un instrumento para la divulgación de cultura. No sólo logró fomentar la lectura, sino que también sirvió para cerrar de a poco una brecha de siglos de antigüedad entre los que pueden acceder a ciertos contenidos culturales y los que no.
En cierto modo, los libros de bolsillo sirvieron para modificar la realidad, por eso creo que es importante reivindicarlos, y reconocerlos como lo que son, herramientas de cambio social.
Fuentes:
https://es.wikipedia.org/wiki/Libro_de_bolsillo
http://bbezaresg.over-blog.com/2015/04/la-historia-del-libro-de-bolsillo.html
http://www.culturaimpopular.com/2010/04/el-nacimiento-del-libro-de-bolsillo.html